jueves, 19 de febrero de 2009

La muerte en directo


Ya tenemos otra nueva (y efímera) mascota para nuestro pequeño blog; se trata de Jade Goody, una ex Gran Hermana inglesa, choni y racista, que, acechada de cáncer terminal, ha decidido vender su Muerte en Directo para regocijo de la audiencia rosada y cochinácea de las hijas de la Gran Bretaña.
Según los médicos que la tratan, este reality puede durar entre tres y cuatro semanas, dependiendo del aguante de la concursante. Se baraja la posibilidad de incluir una prueba diaria de radioterapia, y otra semanal de inmunodeficiencia adquirida.
Goody, que al igual que sus cerditas compatriotas, es adicta al Fish & Chips, al color rosa, y a insultar actrices indias, se va a embolsar un buen piquito por esta exclusiva. Dice, la muy cínica, que lo hace por sus hijos.
Desde nuestro blog, aplaudimos esta nueva vuelta de tuerca a la telebasura, y animamos a las productoras españolas a televisar la muerte de cualquiera de nuestras Grandes Hermanas más apestosas: sea Chiqui, Ania Iglesias o Imma y su novio Bebe.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Amen

Palomita dijo...

Si no hubiera gente que lo viera nadie pagaría un duro a esta mujer... De quien es la culpa? Las televisiones son negocios y como tal tienen que buscar su viabilidad...Esto asegura un share ¿No creen?